No soy objetivo con Cristina Lliso, soy muy fan de los Esclarecidos, de todos sus discos, pero en especial de su segundo y tercer disco, “Esclarecidos 2” y “Por Amor al Comercio”. Cuando después de quince años sin saber nada de ella, corría el año 1997 cuando se editó el primer y único disco de Lliso, el grupo que formó con su hermano tras la separación de Esclarecidos, me enteré que editaría que su primer disco en solitario supe que me gustaría, estaba seguro. Y no me defraudó, ni mucho menos, la voz de Cristina seguía intacta, cálida, e increíblemente atractiva. Todo el encanto de su voz sigue ahí en unas canciones sencillas e intimistas para cualquier tarde lluviosa de invierno al pie de una chimenea. Mis favoritas: “No Viajas Sola”, “Hola Amor” y “Mirar La Luna”; pero me vale cualquier otra.
Ven, ven, ven,
a mirarme el alma, que estoy dolida.
Ven , ven, ven
a cuidarme el corazón.
Por que de tanto mirar la luna, me he olvidado de ver el sol, donde estábamos tu y yo.
ven, ven, ven.
ven, ven, ven…
Ven abrigarme el alma, mi vida, que tengo miedo.
Ayúdame a escribir el libro,
con la receta de la vida.