Otro de mis discos «nocturnos», otro disco con una preciosa portada, otro disco más con una flamenca en la portada, esta vez vestida eso sí. El primer disco de los Tindersticks (1993) en pleno boom del Britpop, supuso una irrupción más que interesante en el panorama musical. Siempre me ha encantado el estilo conocido como pop de cámara (The Divine Comedy, Belle and Sebastian….), pero en Tindersticks hay dos factores diferenciadores, la profunda voz de barítono de su líder Stuart A. Staples y las orquestaciones por momentos cercanas al jazz. Ambos factores, que son la marca de la casa, quedan claramente patentes en este álbum, un disco brumoso, nocturno, claustrofóbico por momentos pero profundamente bonito. El arranque con «Nectar» ya marca el camino y el listón no baja en los setenta y siete minutos repartidos en las veintiuna canciones que componen el disco, doble en su versión en vinilo. Yo llegué a los Tindersticks a través de, precisamente, un single que no está en el disco, aunque se editó en la misma época, «A Marriage Made In Heaven» un dueto con Isabella Rossellini brutal, y que está en mi lista de canciones favoritas de siempre. Los Tindersticks son uno de mis grupos de cabecera, una apuesta segura.
She looked virtually naked
In that dress growing ever tighter
It was saddening the lengths she had gone to
To appear more attractive
In the process losing something
We never knew but still missed
You knew you were lost as soon as you saw her
You saw your life as a series of complicated dance steps
Bonus. El disco no está en las plataformas digitales habituales. Así que ya sabéis..
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