Pale Fountains – «Pacific Street»

Este «Pacific Street» de The Pale Fountains es otro de esos discos que se colaron en mi vida de una manera curiosa. Ya lo conté al hablar de Shack y su «Zilch» ,la primera vez que ví este disco fue en el armario de la habitación de la casa donde pasé el verano de 1986 en Bath. Jean, la dueña de la casa, me había dicho «esta es la habitación de mi hija, se marchó hace un par de meses de casa y aún no se ha llevado todos sus discos, si quieres puedes escucharlos». En aquella pila de discos el primero de todos era este, me llamó la atención la portada (un soldado con dos cartucheras llenas de balas de ametralladora cruzadas sobre su pecho), no tenía ni idea que tipo de música me podía encontrar allí antes de que la aguja se posará sobre el vinilo. «Reach» fue lo que sonó, los primeros cincuenta segundos fueron para unos suaves rasgueos de guitarra y la voz de Michael Head susurrando y de repente….mi boca abierta hasta el suelo, acelerón de guitarra, metales…no podía creérme lo bueno que era aquello, cuando acabó la canción no dejé que sonará la siguiente, volví a mover la aguja al principio, a la tercera escucha dejé que sonará la segunda, «Something On My Mind». Pasó exactamente lo mismo, cincuenta segundos de espera y de nuevo un estribillo brutal. Aquello no era que estos tíos tuvieran una canción buena y la hubieran plantado al principio del disco, no señor, estos tipos eran buenos de verdad. Escuché las dos caras del disco ya del tirón, «Natural», «You´ll Start A War», «Soutbound Excursion»….

Al día siguiente después de clase corrí al HMV de la calle mayor de Bath y la «pesca» de aquel día fue «Pacific Street», al llegar a casa Jean me guiño el ojo y me dijo «vaya ya veo que tienes los mismos gustos que mi hija». Soy fan incondicional de Michael Head desde entonces, uno de los tíos más infravalorados de la historia del pop.

 

Is there something I should say ?
What am I to do ? Have I found a way ?
And in the small hours when I rise
Honey, hold me tight and say it’s just a game
Is there something I should know ?
Shall I stay here for a while ?
There’s always something on my mind

And as I look up to the sky
And I know down deep inside
There’s always something on my mind

Is there something I should say ?
Try to find a way, love me for one night, night
To look at me and then to sigh
I could run a mile and turn ‘round in a day

Shall I turn to you for gold ?
Shall I look at you and sigh ?
There’s always something on my mind

And when I’m happy can I smile ?
Just to know down deep inside
There’s always something on my mind
My mind, there’s always something on my mind
On my mind, something on my mind
Something on my mind, on my mind

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Shack – «Zilch»

0000016717_200Me acuerdo perfectamente, el recuerdo es nítido, muy nítido. En el verano de 1986 pase un mes en Bath (Inglaterra), ya lo he contado unas cuantas veces, el caso es que la señora de la casa donde vivía me alojó en una habitación que había pertenecido a su hija hasta hacía 3 meses, la chica no se había llevado sus discos y Ms. Roberts me dijo que podía escuchar aquellos vinilos sin problema. Entre aquellos discos estaba el «Pacific Street» de The Pale Fountains, escuché repetidamente aquel LP, del que también hablaré por aquí ya que está en la lista, y de The Pale Fountains a Shack sólo había un salto, tras disolver The Pale Fountains Michael Head formó Shack confiando en tener mejor suerte que con su primer grupo. No la tuvo. Michael Head es de esos tipos malditos de la historia del POP, un talento increíble y una mala suerte también increíble, por poner sólo un ejemplo, su segundo disco como Shack no se publicó hasta cinco años mas tarde por que los master de la grabación se quemaron en un incendio, el productor se dejó la copia que quedaba en un coche de alquiler y para cuando la encontró semanas después ya no existía la compañía que debía editar el disco. Un maldito este Michael Head.
Volviendo a «Zilch» es un disco de pop otoñal de ese que apetece oír en días de lluvia, como hoy, pop del que me gusta, sutil, delicado, amable. Una delicia, vaya. Con canciones que no pasarán a la historia, ni falta que les hace, pero que se deslizan sinuosas por tus oidos sin que puedas escapar de ellas. Ahí están «I Need You»,   «High Rise Low Life» o «I Know You Well» para demostrarlo.

Haceros un favor hoy, escuchar este disco con cariño, me lo agradeceréis.

Always in sorrow and never in vain
and never say tomorrow
because, I might not even be there
and it won’t be the same
and never say tomorrow
because I, I need you,
you know I do

today tomorrow, always the same
too late to follow
because I couldn’t even be there
and it wouldn’t be the same
and never say tomorrow
I, I need you,
you know I do.

Toca escuchar el disco en Youtube, no está en las plataformas habituales.